Nell Prado y La Polla

Cuando “El Mago era joven hizo una gran amistad con Manolín Prado, un hombre muy trabajador, que se dedicaba al comercio de mariscos. Ellos tenían un grupo que se reunía todas las mañanas a tomar tiempo (“Ratón” Quezada, tito Campos, Frisa y El Mago). Eran un grupo de enamorados de la hípica y en las mañanas tomaban tiempo para conseguir un buen dato.
La amistad entre la familia Prado y Farrugia se solidificó con el paso del tiempo. Recuerdo cuando íbamos a los juegos de pelota donde jugaban el Chesterfield y el Carta Vieja.
Los que no me conocen saben que soy un tipo muy trabajador, dicharachero, mujeriego y jugador. Mi padre decía que todo el que gustaba chinguear tenía que ser muy trabajador.
En el tiempo que trabajé en los Casinos Nacionales salía de madrugada y a veces iba al muelle de Cambra en El Marañon y visitaba el negocio de la familia Prado a buscar camarones donde trabajaba mi amigo Nell, como gerente encargado.
Por las circunstancias de la vida decidí dejar de trabajar en los casinos y le dije a mi amigo Hugo Torrijos que me iba de vuelta al Hipódromo a entrenar caballos y que me iba a poner a vender La Polla. Hugo me dijo que bueno, así te la compro a ti.
Ya de vuelta al hipódromo me encargué de los caballos de Cuchito Jiménez los cuales entrené por un tiempo y cuando termine la relación de trabajo con Cuchito me acerqué a Rigoberto Paredes y le pedí que me nombrara como “clocker” del hipódromo (tomador de tiempo en las mañanas). Me nombraron como jefe de los mismos y aproveché la oportunidad y me traje a mi amigo Nell a trabajar conmigo en el departamento de “clockers”, ya que la cosa se le había puesto dura.
Por aquel tiempo Omar Torrijos había creado Frigomida y había puesto Vasco Achong como jefe y vi la oportunidad de vender guineo. Compraba la libra a tres centavos y lo vendía más adelante a real. Al día vendíamos como 4,000 libras de guineo e invité a mi amigo Nell a participar en este negocio.
Los viernes nos reuníamos una gallada de gente a jugar La Polla. Yo jugaba La Polla acompañado de Quique Santos, Lulín, mi hermano; Nell Prado y otros, pero nunca ganábamos.
Un viernes decidí no jugar La Polla con mi hermano Lulín y sellé mi formulario con Nell y Quique Santos. Entonces mi padrino, Daniel Ciniglio, tomó mi puesto vacante en el formulario de La Polla de Lulin y sorpresa ellos ganaron 18,000 dólares.
Entonces yo opté por no jugar polla con nadie.
El acumulado de la polla llego a 300,000 mil y Nell me invitó a jugar con él y le dije a Nell que yo no iba a jugar con nadie.
A media noche del viernes, cuando íbamos para a entregar los formularios cerca de la universidad, Nell me comenta que no tenía plata para sellar su polla. Una de 24 y otra de 12 y le dije no te preocupes cambiamos un cheque. Hice un cheque de 50 dólares para que Nell pagara sus pollas y los 14 dólares que quedaron nos fuimos a tomar unos tragos en la Cantina Los Espejos.
El sábado por la tarde se corrieron las carreras y hubo un solo ganador ese día y fue Nell Prado. Él “viva viva” fue muy grande y después de eso pasaron muchas otras historias que serán para otra ocasión.
Nell Prado se ganó el acumulado más grande que ha existido hasta el momento en la Hípica de Panamá.
3 comentarios
Recuerdo esa anectoda…la gente decía que había sido trampa…conoci a prado en calle 20 Marañon frente a la multi…Mi tío fue jinete A.Vergara al igual que su hijo Jesus V…mi primo Javier fue mozo de corral y mi hermano es Tomas «tilico»Brown
Don Andy. Mis respetos y cariño de siempre. Usted es lo máximo.
Dr. Vidal Pérez. Nell Prado luego de eso fue nuestro vecino en Altos del Hipódromo en su Cámaro dorado. Y siempre recuerdo su perro Ricky hasta cumpleaños una vez le hizo. Y luego de ganó los Clásicos con Benedicto.
recordar es vivir